sábado, marzo 05, 2016

94. Nieve en Segovia

TEMAS: Ley natural, cultura, ciencia.

* * * * *

RESUMEN: 1. Existe una ciencia que cuenta con la naturaleza de las cosas y con las leyes naturales para construir, para progresar. Sin embargo, también existe otra clase de ciencia que desafía a la naturaleza y pretende oponerse a las leyes naturales para evitarlas y hasta anularlas si fuera posible.
2. El acueducto de Segovia está construido con sillares de granito asentados sin argamasa entre ellos.
3. La foto del acueducto cubierto de nieve, restaurado y convertido en monumento me hace admirar a sus constructores  y a su cultura. Pero, en realidad, el acueducto nevado es un sentido homenaje a la Naturaleza.

* * * * *

Ayer, sábado y 27 de febrero de 2016, nevó en muchos lugares de España. Entre otros sitios, nevó en Segovia. Los periódicos de hoy aparecen con la foto del acueducto romano de Segovia cubierto de nieve mientras —a sus pies— la ciudad procura reponerse de la nevada y volver a la actividad normal en medio de las dificultades propias del temporal de frío y nieve.
El acueducto romano se construyó a principios del siglo II d.C. en tiempos del emperador Trajano y es una obra de ingeniería para llevar agua a la ciudad desde un manantial que se encuentra a más de 17 kilómetros de distancia. Dispone de un canal de conducción, estanques de recogida del agua y de decantación de las arenas y una gran arquería que es la que siempre aparece en las fotos de los turistas y de los periódicos.
Hoy veo de nuevo la foto del impresionante acueducto segoviano bajo la nueve y no puedo dejar de admirar que después de 19 siglos de nevadas, tormentas, aguaceros, riadas, temblores de tierra, guerras y todas las demás inclemencias e imprevistos que hayan podido suceder sigue estando en pie haciendo grandes a sus constructores.
Me entero que está construido con sillares de granito asentados sin argamasa entre ellos, por el sistema de empujes de piedras, a peso y por encaje de los propios sillares de piedra de manera que aprovechando la fuerza de la gravedad se sujetan los distintos sillares y así hasta el día de hoy.
Me quedo pensativo. Los romanos construyeron contando con las leyes naturales. Las fuerzas y los pesos para construir andamios y poleas y para trasportar los bloques de piedra hasta el lugar de su posición. Y la fuerza natural de la gravedad que mantiene unas piedras sobre otras, empujándose para no moverse.
Existe una ciencia que cuenta con la naturaleza de las cosas y con las leyes naturales para construir, para progresar. Sin embargo, también existe otra clase de ciencia que desafía a la naturaleza y pretende oponerse a las leyes naturales para evitarlas y hasta anularlas si fuera posible. La primera ciencia es una ciencia natural no solo porque integra la naturaleza, sino porque ella misma se integra en el mundo natural como una pertenencia más del universo. La segunda ciencia se rebela contra las leyes naturales, se enfrenta decididamente contra ellas y pretende crear un mundo nuevo.
Las consecuencias de las dos clases de ciencia son bien distintas: la primera, se mantiene, es útil; la segunda, exige mucha atención, muchos cuidados y, cuando le faltan,  deviene inútil y acaba destruida.
La foto del acueducto de Segovia cubierto de nieve, restaurado y convertido en monumento me hace admirar a sus constructores  y a su cultura. Pero, en realidad, el acueducto nevado es un sentido homenaje a la Naturaleza. ■