sábado, enero 07, 2023

108. Libres

 

 "Verdad y libertad, o bien van juntas o juntas perecen miserablemente"

 

* * * * *

 

Todos entendemos por libertad la posibilidad de elegir entre unas cosas u otras, es la libertad de elección o “libertad pro choice”. Es algo así como coger un tren. Cuando llegas a la estación central de Madrid puedes subirte a cualquier tren. Solo que un tren te lleva a Barcelona y otro a Huelva, por ejemplo.

Entonces, la libertad no solo sirve para elegir a qué tren me subo, sino que también sirve para cumplir un proyecto, es la libertad de determinar mi destino, es la “libertad para”. Porque no se trata de subirme a cualquier tren, es decir, al tren que más me guste –por ejemplo, el tren bala– sino que se trata de subirme al tren que me lleva a la ciudad donde quiero ir. Soy libre para elegir cualquier tren, pero elegiré el tren que me lleve a mi destino.

Pero para poder elegir el tren que me interesa, antes tengo que estar informado del destino de los trenes. Tendré que ir hasta los paneles generales de la estación e informarme de los destinos y andenes de cada tren para poder elegir el tren correcto. Es la libertad de conocimiento que me permite elegir con toda la información suficiente para acertar en la elección: es la “libertad de”.

Hace tiempo un presidente del gobierno de España se atrevió a proclamar que la libertad nos hace verdaderos porque entendía que la realización de cada persona consiste en ser lo más libre posible, sin ninguna limitación. Es cierto que alcanzando nuestro pleno desarrollo nos realizamos plenamente. Pero no es cierto que esto suceda de cualquier manera, sino que antes debemos saber qué es lo que queremos ser y hacer con nuestra vida. En efecto, "Verdad y libertad, o bien van juntas o juntas perecen miserablemente" (san Juan Pablo II, Enc. Fe y Razón, n. 90). No es cierto que la libertad nos haga verdaderos, sino que es la verdad la que nos hace libres (cfr. Juan 8, 31-42).

La libertad que tengo para subirme a cualquier tren no me aprovecha si antes no tengo la información suficiente para poder elegir cuál es el tren que me lleva a mi destino. Ahora comprendo que la libertad sin la verdad no es más que una quimera.

Sin conocimiento no sabremos elegir nuestro destino, ni adónde queremos llegar ni qué debemos hacer. Resulta imprescindible la formación personal de cada uno, como me resulta imprescindible informarme sobre dónde se encuentra estacionado mi tren para no acabar perdido en cualquier esquina de España.

 

 

BIBLIOGRAFÍA

1.      San Juan Pablo II, Encíclica Fides et Ratio, n. 90.

2. YEPES STORK, Ricardo, El sentido de la libertad. www.arguments.blogspot.com

3.      TERMES, Rafael, Libertad y verdad, ABC, 18 de septiembre de 1995.

4. SPAEMANN, Robert, Dios, la libertad, la realidad. www.fluvium.org/textos/etica

5.  LLANO CIFUENTES, Alejandro, La vida lograda, Ediciones Ariel, Barcelona. 2002.

6.      MARIANO FAZIO, conferencia en la Universidad de La Sabana, 25 de febrero de 2022.

No hay comentarios: